Ballenas en Sri Lanka

En toda vuelta al mundo hay un apartado especial para los animales, hasta ahora no nos podemos quejar… cada continente, cada país y cada región tienen sus “animalillos” particulares, en el caso de Sri Lanka el que más nos impactó fue la ballena.

Observar ballenas en Mirissa

Llegamos a Mirissa un poco por casualidad, toda Sri Lanka rezuma esta palabra en realidad, íbamos de un lugar a otro según nos apetecía, según nos recomendaban y según nos venían bien los horarios de los autobuses públicos, es lo que pasa cuando uno viaja con un bajo presupuesto. Así que cuando nos dijeron que Mirissa era un lugar ideal para observar ballenas en Sri Lanka, no nos lo pensamos, encontramos una gran agencia de la que fiarnos, Whales Lanka.

Mirissa tiene playas preciosas, aunque el pueblo es muy pequeño cuenta con un gran abanico de alojamientos y restaurantes para todos los bolsillos, es principalmente conocido por la actividad del avistamiento de ballenas. Si os embarcáis en uno de los barcos de Whales Lanka os ofrecen un 90% de posibilidades de encontrar a estos grandes mamíferos (y eso siendo temporada baja). Navegaréis durante un máximo de 5 horas en un barco muy confortable con dos pisos, el primero para relajaros durante el trayecto, el segundo para divertiros esperando a que la ballena salga a la superficie a respirar.

Como esta actividad se realiza bien pronto, a las 7 de la mañana salís al mar, os darán un desayuno que consta de sándwiches y zumos, aparte de una botella de agua, todo incluido en el precio de la excursión. El personal está muy pendiente de vuestras necesidades, y siempre atentos al avistamiento del gran mamífero acuático. Cuando llega el momento, todo el mundo sube a contemplar la belleza de la naturaleza, es un momento mágico, donde se comparten miradas, sonrisas y algo de excitación.

Los chicos siempre os mostrarán a donde mirar, ya que para nosotros no es fácil, y de este modo no os perderéis ni un instante de los momentos estelares cuando por fin la ballena emerge como si os quisiera saludar con su chorro de agua. Lo que sí os podemos decir sin ninguna duda es que esta agencia en concreto es muy respetuosa con los animales y que los empleados os harán pasar una jornada muy divertida mientras os guardáis en vuestras retinas las imágenes que se os escapen con la cámara, ¡hay que ser rápidos!

Dónde dormir en Mirissa

En cuanto al alojamiento, sin esperarlo fuimos a escoger la mejor de las ubicaciones, ya que este hotel, la Villa Atulya, está emplazada justo en frente del mar y a escasos metros de una de las estampas más bellas de Sri Lanka, los pescadores que se colocan a lo alto de un palo clavado unos metros mar adentro desde la orilla. No nos hizo falta caminar mucho por la playa para divisar a ese gran hombre, que día a día y de sol a sol se enfrenta él solo a la dureza del mar, a la dureza de los elementos y del equilibrio para conseguir algo de pesca, desde luego sostenible. Este modo de vida es común en esta zona y la otorga de una particularidad especialmente fotogénica, para los amantes de la fotografía y también, como no, para los amantes de lo bello, de la tradición y de las diversas culturas del mundo.

En Villa Atulya además disfrutarás de una piscina excelente y no muy concurrida, ya que se trata de una antigua casa remodelada por completo, con pocas habitaciones, pero ofreciendo gran espacio, diseño y tranquilidad. Los desayunos son al aire libre, frente a tu habitación, ya que cada una dispone de su espacio exterior, con el arrullo del mar y su brisa cálida, una gran cocina, y un gran servicio. Siempre dejándote a tu aire pero al alcance de cualquier petición, además tienen una muy buena conexión a Internet.